La prensa les llama un verso suelto, no se si es suelto o pareado,en todo caso atípico. Pero versos rompedores siempre los ha habido, solo que en los tiempos duros de la nobleza/monarquia, los versos solo podían rimar, no cabía otra posibilidad.
Los nórdicos siempre han sido distintos, lo fue Harold cuando se enamoró de la hija de un comerciante, tuvo que pasar lo suyo, quizás por eso no se opuso o no tanto a la boda de su hijo Hakón con otro verso suelto, aunque entre la hija del comerciante y la suegra hay diferencias varias.
Carlos Gustavo también se enamoró de una azafata de congresos, cuando enamorarse de una azafata estaba muy mal visto, entre Silvia y su ya casi nuera también hay diferencias prosaicas o de rima, como cada cual quiera verlo.
Aquí en la España ñoña de los 60 no dejaron al entonces Príncipe Juan Carlos salir con la Princesa de Saboya, no se sabe muy bien porqué. D.Juan de Borbón (abuelo de Felipe VI)era un Sr muy conservador , de la vieja escuela; Los príncipes se casan con princesas y las plebeyas quedan para otros menesteres.- Hoy las cosas se han invertido, las plebeyas se casan con príncipes y son las princesas las que han quedado para otros asuntos, algunos de dudoso gusto.
También pusieron el grito en el cielo cuando Felipe salió con la hija del Marques de Mariño, hablo de la Sartorius , pero la vida es muy jodida, y les dio un plato de sopa sin el aliño que hubieran querido, no voy a caer en la estupidez de las comparaciones, Felipe es feliz con quien está, y como creo en la predestinación moderada, pues no tengo mas que decir.
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