Ramón Mercader, el hombre de rostro triste.

Esta semana vi la película El Elegido y no me gustó, dice la critica que es por el bajo presupuesto, es lo que sucede con el cine actual en general, excepto con algunas películas americanas. Ya no se puede invertir en cine como se hacía antaño, porque las películas no aguantan en cartel mas de un mes.

Ramón Mercader fue un funesto personaje, que se movió no por convencimiento, sino por oscuros objetivos que la película no aclara. Estuvo muy enamorado de Africa de las Heras, pero ella lo utilizó, no fue un amor correspondido por parte de ella.En la película este asunto está algo liado.

Yo imagino que Mercader se arrepintió de haber pasado a la historia como el asesino de Trotsky, con quien se podía estar de acuerdo o no, pero él fue un títere de Stalin, uno más, porque en aquellos años los servicios secretos soviéticos eran de película de terror. 

La decisión del piolet fue también lamentable, ya que has decidido matar a alguien dale un tiro. Mercader se pasó 20 años en la cárcel, y cuando salió fue para ir a Moscu, donde recibió una medalla, no recuerdo bien de qué, pero una de las tantas que daba Rusia, y que solo servían para no hacer cola, porque se colgaban la medalla cuando salían de compra.

Nunca se sintió bien en Moscu, por el clima, el idioma, y posiblemente por alguna cosa más, porque llegar a un país con cierta edad, sin conocer ni el idioma es complicado, con la colonia española tampoco hizo migas, tuvo la penitencia en vida. Había pedido en varias ocasiones que lo mandaran a Cuba, pero por razones que se desconocen Moscu no quería, y en un control rutinario le detectaron un cáncer, es  entonces cuando lo mandan a la Habana. Y allí donde conoce a Padura, que no supo quien era hasta que falleció, pero le dejó unos documentos valiosisimos contando toda la historia, de como se gestó el asunto, por eso Padura da datos en su obra El hombre que amaba a los perros que nadie más sabe y no los han podido poner en la película. La obra de Padura es magistral, a mi me encantó y no tengo empacho en decirlo, pero la película sea por el bajo presupuesto o por el guión, incluso por  los actores, pues no me ha gustado. 

    Trotsky no fue un santo, aunque en Mexico no era el hombre del ejercito rojo, aquel hombre fuerte  y autoritario, allí era un hombre vencido y acorralado por los esbirros de Stalin, pero nadie se merece morir por discrepancias ideológicas y menos a golpe de piolet.La vida de Trotsky fue un cúmulo de desgracias, pero esto no es una biografía del líder ruso.