lunes, 27 de marzo de 2017

La premonición


Este relato no es ficticio sino real, y sucedió en los años 70, sin poder precisar la fecha exacta, sucedió en Madrid,  durante mucho tiempo lo tuve olvidado  y hoy no sé porqué me vino a la memoria.

Yo supe de esta historia viviendo en Fés, porque yo en Fés aprendí "latín". Tenía amigos judíos,porque siempre tuve amigos judíos y  a veces me invitaban a sus fiestas, y en una de ella, una boda concretamente me colocaron al lado de una española que había llegado desde Madrid, venía acompañada por su esposo, y por lo del idioma me pusieron junto a ella, desde el primer momento me cayó bien, a veces surge una corriente de simpatía entre las personas y congenias.

Aquella boda como todas las bodas judías a la que he asistido estuvo muy bien,fue realmente lujosa; y la pareja se iba a quedar tres días visitando la ciudad, les pregunté si ya habían visitado la Medina, y si no lo habían hecho si tenían con quien hacerlo, a lo que me dijeron que no, y entonces me ofrecí a enseñársela. Visitar la Medina de Fés es una experiencia única.

Después del recorrido que duró casi tres horas, nos sentamos a tomar un batido curioso de leche de almendras y zumo de uvas negras, realmente delicioso y entonces hablamos un poco de uno de mis temas preferidos, si el futuro está escrito o no, y hasta que punto el azar juega un papel determinante.Y entonces esta mujer me contó la siguiente historia.

A principios de los 70 contrajo matrimonio con su novio, con el que llevaba saliendo desde que tenía 18 años, un chico de un pueblo de la provincia de Madrid perteneciente a una familia de posibles, llevaban tres años casados y el matrimonio iba bien, pero según ella faltaba algo, entusiasmo, a los tres años habían caído en una monotonía de la que no veía la forma de salir, él era un hombre muy conformista,no esperaba gran cosa de la vida, pero ella era inquieta, trabajaba de enfermera en un hospital de Madrid, y después de tres años seguían sin hijos. 

Un buen día los invitaron a la boda de un amigo de su marido, creo recordar que era abogado y entonces sucedió algo que ella nunca había experimentado. Al llegar a la Iglesia y ver al novio que esperaba a la mujer con quien iba a contraer matrimonio, se cruzaron las miradas, y según me dijo, tuvo una especie de premonición y supo que ella se casaría con ese hombre al que no conocía de nada y que sería en ese mismo lugar.

Al año de aquella boda , su marido falleció en accidente de coche, y el hombre  que había visto en la Iglesia fue a darle el pésame, misma extraña sensación. Pasaron seis meses y un buen día se lo encontró en el hospital donde ella trabajaba como enfermera, se saludaron y le contó que su esposa estaba ingresada pues le habían diagnosticado un cancer de seno. 



La próxima  vez que se volvieron a ver  fue en una cena, un año más tarde, al parecer fue idea de él el que la invitaran ,su esposa había fallecido y no se volvieron a separar , se casaron en la misma iglesia donde se vieron por primera vez.

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