Viejos libreros.

Esta considerada la mas antigua de Madrid y posiblemente de España. Es el viejo  librero, el de siempre, el que no necesita mirar en el ordenador si tiene o no el libro que pides, porque el sabe, en que estante está. En París han sobre vivido y hay varias, pero aquí triunfaron las franquicias.

Ser franquiciado es lo peor de lo peor, los franceses no gustan de ese sistema importado de USA. Porque no eres libre para decidir ni el horario, ni que días cierras, eres un esclavo,no puedes decidir que productos compras.

No es que sea algo nuevo, han existido desde hace unos 70 años, cuando llegó la moda. En Sevilla estaba la franquicia del Café Catunambú, y el franquiciado era un esclavo de la marca. Cayeron por muerte propia.

Luego vino la moda de la franquicia inmobiliaria, con comisiones que tenías que dar,vendieras o no. La de las clínicas dentales, que han fracasado la mayoría, con algún que otro escándalo de por medio y con clientes descontentos. Donde esta tu estomatólogo que te conoce , no puede ser sustituido por alguien, que tiene que trabajar a destajo, con un sueldo de miseria, y que intentará colarte algún arreglo innecesario.

Y lo ultimo las franquicias de libros, librerias mastodónticas, donde cada vez hay un empleado nuevo. Y eso que no he querido hablar de las perfumerías.